¡Hola, cositas!
Aunque hace más de tres años que dejé de ver la serie japonesa Naruto, este año he vuelto a engancharme. ¿Por qué? Pues por influencias de la universidad, que todo hay que decirlo. Hay bastantes otakus por ahí y algunas mañanas veo una copia exacta del protagonista de OnePiece con su bonito y redondo sombrero de paja. ¡Quién diría que en Vic vería eso!
Aunque hace más de tres años que dejé de ver la serie japonesa Naruto, este año he vuelto a engancharme. ¿Por qué? Pues por influencias de la universidad, que todo hay que decirlo. Hay bastantes otakus por ahí y algunas mañanas veo una copia exacta del protagonista de OnePiece con su bonito y redondo sombrero de paja. ¡Quién diría que en Vic vería eso!
Pues en resumen, que vuelvo a seguir el manga y el anime semanal como un ritual religioso. La versión animada está un poco muerta por la mala animación, el dibujo regular y la lentitud de la historia (además de los interminables rellenos) pero algunas partes se salvan como la batalla de Sasuke vs Danzô. El manga, bueno... tiene sus momentos delirantes aunque los últimos capítulos no son gran cosa ya que la brutal guerra profetizada ha sido bastante ridícula y ha decepcionado a muchos fans. Después de la lucha entre Naruto y Pain -si quieren reírse, véanla en anime-, la muerte de Itachi (T.T), la aparición de Madara como líder de Akatsuki o la verdad sobre la masacre Uchiha, los sucesos actuales saben a poco. Espero que Kishimoto sepa lo que está haciendo y por lo menos que nos muestre algún flashback de la batalla épica entre Hashirama y Madara. ¡Voto por un Madara Gaiden!
Bueno, aquí me despido, que debo acabar unos deberes de inglés de la academia. ¡Qué tortura! Sed felices :)
xxx
